El cine siempre nos ha fascinado y nos seguirá fascinando por esa forma en la que nos transporta a otras realidad con historias cargadas de significados diversos, pero hay que aceptar que una cosa son las películas y otra muy diferente sus premios y en específico hablamos de los Óscar, los cuales se han vuelto aburridos.
Y antes de que me quieran pasar por las armas y hacerme justicia como si estuviéramos en la época de la Inquisición, expondré los motivos de por qué los Óscar se han vuelto aburridos.
Primero, hay que ser honestos, la ceremonia es muy larga. Sabemos que por la importancia, los Óscar toman tiempo, pero se supone que con el paso de los años se ha previsto la manera de hacer más llevadera la entrega.
Y en ese sentido, destaca que ha habido momentos cómicos e inolvidables entre una premiación y otra (gracias, Will Smith) que han hecho más digerible el evento.
Sin embargo, no siempre han existido estos momentos graciosos y en ocasiones, la entrega de los Óscar tiene segmentos muy largos y que no atraen del todo las miradas.
Segundo, los galardonados. Si bien es cierto que ha habido sorpresas gratas cuando se trata de las premiaciones, también es cierto que los Óscar se van vuelto un tanto aburridos justo porque se vislumbra quién se llevará una estatuilla.
Se tenía que decir y se dijo. Algo de lo bonito del cine es que tiene gente con una gran capacidad para darnos historias memorables, pero también hay que darle oportunidad a quienes no tienen todos los reflectores y que tienen oro puro en las manos.
“En vez de hacer una película de 200 millones de dólares hagan 20 de 10 millones. Les prometo que el próximo Martin Scorsese está afuera, la próxima Greta, el próximo Nolan! Solo necesitan una oportunidad para demostrarlo.”
Cord Jefferson.
Por último, desde hace un tiempo es evidente el sesgo que existe cuando se trata de abordar temas importantes o de incluir en los nominados películas y directores con grandes historias, independientemente del género y raza.
Tan solo hay que recordar que hace unos años, en la lista de nominados no hubo un solo afrodescendiente, ni directores ni actores ni películas, mientras que este año quienes faltaron fueron Greta Gerwig y Barbie, siendo que las mujeres han desarrollado y seguirán desarrollando un papel importante en la industria cinematográfica.
Aceptémoslo, los Óscar se han vuelto aburridos y ha sido gracias a la industria cinematográfica que esto sucede. El público desea ver cosas nuevas y que la premiación se renueve, si no, poco a poco verán cómo la expectativa del evento desaparecerá y eso sí es algo que preocupa. El cine vive del público.
