Hace algunos días les compartí una de mis más escalofriantes experiencias paranormales que pasé cuando recién comencé a vivir en mi actual casa, para los que no saben de qué estoy hablando, aquí les dejaré la anterior nota y así puedan comprender mejor lo que a continuación les contaré. Como ya les mencioné, actualmente vivo en una casa en medio de dos panteones, pero antes vivía en otra que no está muy lejos de aquí.

Cada vez que pienso en mi anterior hogar, me acuerdo de algunos muy buenos momentos que pasé ahí, pero también de otros que fueron inexplicables y me hicieron sentir completamente aterrorizada. Y eso es de lo que quiero contarles hoy, otra de las tantas experiencias que tuve hace años.

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En el año 2005, yo ya había pasado por pequeños acontecimientos extraños, que si gustan puedo contárselos después en mis próximas notas, pero uno de ellos me dejó helada, ya que ese mismo año, mi familia había decidido construir para mi, un nuevo cuarto justo cerca de la entrada principal de la casa, quedaba un poco lejos de las demás habitaciones, eso no había sido un problema para mí hasta después.

Yo era una niña, me encontraba tan emocionada por tener mi propia habitación y me gustaba estar sola; a pesar de las experiencias de miedo que había tenido antes, trataba de pensar en lo más coherente y realista para aquellos sucesos, ya que mi madre siempre me decía que los fantasmas no existen, así que continúe pensando de la misma forma.

En una noche, mis hermanos y yo corríamos por toda la casa porque estábamos jugando al escondite. Recuerdo que solamente teníamos una luz prendida para que fuera más difícil encontrarnos, así que casi todo estaba oscuro. Llegó mi momento de buscar a los demás y alcancé  a ver claramente cómo uno de mis dos hermanos había entrado a mi habitación, así que rápidamente fui hacía él, pero en cuando quise entrar, alguien vestido completamente de blanco y con ojos brillantes amarillos salió a asustarme.

Comencé a gritar muy fuerte por el miedo pensando que había sido mi hermano mayor, cuando de pronto, se encienden todas las luces, volteo y todos comenzaron a salir preocupados del otro lado, para ver que me estaba pasando, lo extraño fue que mi dos hermanos y mi mamá, quienes éramos los únicos en casa, estaban saliendo de las otras habitaciones lejos de la mía.

Me preguntaron por qué había gritado y yo les dije que alguien justo en ese momento salió de mi cuarto y me gritó. Asustados, se metieron a investigar y no encontraron a nadie. Siempre me quedé con la duda de qué había sido eso, aún puedo recordar ese rostro tan extraño de aquel fenómeno y de la forma en la que me gritó para asustarme.

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Actualmente alguien más ya vive en mi anterior casa y el año pasado se me ocurrió preguntarles si ellos han vivido por situaciones paranormales ahí y me confirmaron, que, en efecto, tienen algunas experiencias extrañas y muy escalofriantes, cuando me las contaron me sorprendí bastante porque incluso son aún más impactantes. Pero en la próxima nota se las contaré…

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